Fui a la casa del viejo amable, que me citó una vez más creyendo que iba a aceptar el puesto y que estaba listo para hacerme algunos tests para ya entrar a laburar.
Empiezo a hablar, creyendo que al tipo, que yo consideraba amable, le iba a importar las cuestiones que sopesé para tomar mi decisión. Mientras le hablaba de mi viaje al norte, se enervó.
Jamás me insultaron en un tono tan calmado ni me hicieron sentir tan estúpido.
Viejo amable - Vos y yo terminamos mal. Ahora, olvidate de mi.
Andrew - Difícil.
Parece que esto de que la vida es una caja de bombones, y que nunca sabés qué te va a tocar, funciona para ambos lados.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
5 comentarios:
Andrew, no worries, no worries. No es quién para hacerte sentir estúpido
Andate al Norte y sabés cómo te olvidás! :-)
bueno che, borron y cuenta nueva..
q el viejito haga mas entrevistas...
lindo el norte... lo digo yo q vivi 8 años en salta :P
cada día te admiro más andrew
la tenés re clara con lo que querés
y si te vas al norte, traeme un tucumano!
Aqua: Olvidar, jamás.
Pumpkins: Conectame con alguien que tenga casa!
Mosquita: Primera vez que me acusan de eso.
Mosquita2: Están caros pero veré que puedo hacer.
Publicar un comentario