lunes, 31 de diciembre de 2007

Working Man

Durante Enero voy a cubrir a Jazzmin en la clínica kinesiológica para mascotas donde trabaja, porque ella se vá de viaje a Israel. Hoy fue mi primer día.
Mi jefa llegó tarde, hubo pocos pacientes y cerramos comiendo sandwichitos. Podría acostumbrarme, incluso al perpetuo olor a perro.
Y debo admitir que uno no se dá cuenta de lo hechas mierda que estan las veredas hasta que transporta a un perro paralítico en una carretilla.

sábado, 29 de diciembre de 2007

Somos looos mitomaniacs

Últimas mentiras en las que agarré a mi amigo Garry:

Que había sido el director de aquél videominuto de la pava (Que ni siquiera vi)
Que iba a dirigir aquel cortometraje en fílmico
Que tenía una amiga (Que, para su desgracia, resultó ser amiga de una amiga mía) cuya familia era dueña de prácticamente la mitad de Jujuy
Que los anteojos (mis anteojos) que tenía puestos ese día se los había encontrado tirados en San Telmo

Con Marvin tenemos la teoría de que nuestro amigo Fergus necesita tener sexo. Como ya se avivó de que planeábamos contratarle una prostituta, pedirle que finja ser una mina normal y le tirara onda en un bar (cosa que no le gustó) decidimos que teníamos que conseguirle una mina de verdad que se prendiera a la obra de bien que intentábamos hacer.
Ayer, Marvin y yo nos quedamos -después del asado que hizo en su casa- con Araceli, para comentarle nuestro otro plan.
Plan que se vino abajo en el momento que ella nos desmintió, en un contexto de charla que había probado ser de absoluta sinceridad entre nosotros, que jamás le había dicho a Garry que tenía ganas de acostarse con él, como él nos había dicho a nosotros y en base a lo cuál habíamos creído posible convencer a Araceli (Que también es amiga de Fergus y podía llegar a comprender la necesidad) de que tenga sexo con Fergus; todo a cambio de que nosotros lo convenciéramos a Garry de que se acuostaracon ella.
Como me dolió agarrarlo en esa mentira a Garry. Empiezo a pensar que su problema es peor que el de Fergus.

miércoles, 26 de diciembre de 2007

Las navidades

Okey, hace no más de 365 años nacía Sir Isaac Newton. Algún tiempo antes, moría el papa Adriano I; y unos setecientos noventa y cinco años antes, nacía Jesús de Nazaret; un judío de galilea que andaba en sandalias y vestía una túnica, atada con una soga berreta, sin saber que poco después de cumplir treinta años lo íban a crucificar y todos íbamos a recordarlo. Todos excepto la familia Chaplin, claro, cuya hija Geraldine recordaría esa fecha de diciembre como el día en que su padre murió, a los ochenta años, mientras dormía.
También es el caso de los Betancourt, que recuerdan el cumpleaños de su hija, esposa y madre, actualmente captiva de las FARC, en Colombia.
Hace un año moría James Brown, el padrino del soul, mientras paralelamente, en una línea de tiempo corrida un par de miles de años, los antiguos en Roma celebraban el día de Apolo.
¡Vaya casualidad, que un pueblo intentando imponer una religión -impulsada por el martirio de alguien a quién ellos mismos martirizaron- tenga una festividad que coincide con la fecha de nacimiento de dicho mártir! Pero no es irónico, porque unos mil setecientos siete años después de que se celebrara la primer navidad, yo recuerdo la misma fecha, un año antes, cuando mi vieja lloraba en el departamento de mi abuela con una copa en la mano mientras recordaba el año de mierda que acababa de pasar por el divorcio con mi viejo, mientras yo no me venía venir que un año después iba a seguir festejando la misma festividad idiota, sin encontrar una razón más que brindar por el nacimiento del hombre que sentó las bases de la física moderna, lamentar la muy necesaria muerte de Charles Chaplin y reírme del papa Adriano I, que murió en el cumpleaños de su salvador. Y eso ya es un poco más irónico.

viernes, 21 de diciembre de 2007

Short Formats

Volviendo de la lectura de poesía del grupo de Sara... Bastante malo y repetitivo.

Marvin - ¿Cuál es el secreto de la poesía?
Andrew - Repetir una frase varias veces, varias veces, varias veces.

En el subte...

Marvin - En la próxima nos bajamos, nos bajamos, nos bajamos...
Andrew - Si, porque es nuestra parada, nuestra parada, nuestra parada, parada.

En la calle...

Andrew - Disculpe, señor ¿Tendría la hora, la hora, la hora?
Señor - Las diez y media
Marvin - Muchas gracias, muchas gracias, gracias.

Y en el bondi...

Andrew - Ochenta por favor, favor, favor.
Colectivero - Como no, como no, como no...

Momentos así lo reconcilian temporalmente a uno con la ciudad.

martes, 18 de diciembre de 2007

¡Oh, Dios mío, no!

Es oficial: Me volví adicto al ejercicio.

lunes, 17 de diciembre de 2007

Cinco razones por las que soy medio raro

En orden descendente:

  1. Me exfolio la cara.
  2. Jude Law me parece lindo.
  3. Me sé la letra entera de "Wannabe" de las Spice Girls.
  4. Savage Garden me puede.
  5. Me emociono con el final de "El Hombre Bicentenario"

domingo, 16 de diciembre de 2007

... Words expressing something other than their literal intention

Con Marvin nos planteamos algunos proyectos para lo que queda del año y principios del año que viene. El primero es para Canal Encuentro, para el cual tengo que leer y releer a Cortázar, hasta agotar su bibliografía.
El segundo, también para Encuentro, es uno viejo que desemplovamos y del que solo resta redactar la carpeta creativa y pensar un pitch copado.
El tercero, menos ambicioso, consta de un par de radioteatros para estaciones de previa de sábado por la noche. We shall see.
Hoy, asado en casa.
Bridget, una chica que en su momento me voló la cabeza, me parece ahora ligeramente desagradable y patética, pero sin la carga axiológica de la palabra. Y obviamente, el sex appeal y el patetismo son como el agua y el aceite, o como la bondiola y la mostaza.
Vino Jazzmin. También la había visto ayer, en lo de Helen, a cuya casa fui tras ver el documental de San Martín que, como todo sobre el Libertador, me conmovió a patadas en el pecho y hasta la antesala de las lágrimas.
Jazzmin, chica de mis fantasías pasadas y latentes, linda si las hay, me cuenta, inconsciente de la ironía, que parece que va a cortar con su novio (Un ex-profesor de Imagen y Sonido mío, e hijo de mi futura Jefa), mientras yo empiezo a salir con Jezabel, con un pie dentro de la monogamia.
De yapa, parece que las familias de Jazzmin y Jezabel comparten una quinta de fin de semana y son muy amigas. Now, that is irony!
Lo más gracioso es que, con esto en la cabeza, fui a ver a Lucy, amiga de la facultad, cantar en Deriva (Bar careta de Dardo Rocha) y una de las canciones que cantó fue "Ironic", de Alanis Morissette.

"And, isn't it ironic?... Don't you think... ?
A little too ironic... and yeah I really do think... "

martes, 11 de diciembre de 2007

Behold

No estudié nada. Pero nada ¿eh? Y aprobé sociolomierda, mierdología.
Soy el más grande chamuyero the world has ever seen y creo que todo se lo debo a mis viejos, por leerme cuentos de aventuras cuando era chico.
Me dotó de una habilidad narrativa y un poder de hipérbole que, bueno, francamente es más irresistible que un sandwich de bondiola tras día y medio de ayuno.
Lo sé por experiencia.

Potpourri

Odio ser uno más del repugnante montón de adolescentes que descargan sus problemas en brutal prosa, pero la verdad es que, de la misma manera que el asalariado necesita de la televisión para descansar su mente empastada de las situaciones laborales de la jornada para darle fin a la misma, yo necesito descargarme para alivianar el peso que la implacable levedad de situaciones produce en la mía.
Simplemente, me mantengo ocupado en torturarme por no estar ocupado; y cuando estoy ocupado, mantengo ocupada a cierta parte de mi cerebro en fantasear secreta y no tan secretamente con no estarlo. Como se verá, no tengo realmente opción.
Si tan solo pudiera imaginarme como heredero legítimo de un título nobiliario especial que me entitulara a recibir una fortuna sin trabajar y que no solo me asegurara, sino también que me hiciera soberano y responsable, de una vida completamente ociosa, eso, sin duda alguna, sería la gloria.
¡Pero no, mil veces no! Me conozco suficiente, lo hago hace casi veinte años y por desgracia sé demasiado bien que aún en una situación así me torturaría, soñando con una vida asalariada. Parece, en efecto, que no he nacido para este mundo. Parece que la realidad que me obligo, quien sabe por qué, a tragar en cada inhalación y a digerir en cada exhalación no se contenta ya con atormentarme en mi tiempo de ocio, de trabajo y de reflexión, sino también en el de mis ensoñaciones de vigilia.
Hoy, como otras quinientas mil veces, leí en el texto de Norbert Elías -que el maldito final de Sociolomierda (O Mierdología) me obliga a leer y releer- que los seres humanos estamos permanentemente expuestos a la acción de eventos coactivos, los cuales no podemos explicarnos debido a la falta de claridad en los conceptos sociológicos y que terminamos atribuyendo a figuraciones relativas a lo mágico, lo mítico y lo sobrenatural.
Las quinientas mil veces que leí eso me llamó la atención, porque creo que el infeliz dio en el clavo en ese sentido. Cuesta creer que la gran parte del sufrimiento que uno siente sin saber por qué no es producto de las presiones, de que el mundo es una mierda, de que hace calor, de que le duele la cabeza, de que no puede elegir, ni de que lo fuerzan a hacer cosas que no quiere, siendo que eso y todo lo demás no forman sino un producto del accionar y de la contribución de uno dentro de una gran pelota de mierda, que uno acepta o que, paradójicamente, lo obligan a aceptar -que a razones prácticas termina siendo lo mismo-. Y lo peor de todo es que, siendo a partir de pedacitos de esta pelota de mierda que uno construye su paradigma, es imposible pensar una solución si no es dentro de la misma pelota de mierda, lo cual es imposible por cuestiones obvias.
Para mi, al mundo le hace falta una nueva revolución que nos deje a todos patas para arriba, vistiendo pantalones de invierno en la cabeza y en verano, comiendo helados de hígado encebollado de un pequeño spray libre de CFC que sea adquirible en pequeños puestos ubicados equidistantemente a un punto principal en una ciudad mundial a la que todos podamos llegar, pagando nuestro viaje contándole una anécdota al conductor de una gran oruga metálica, que transite por vías volantes sustentadas por un motor que funcione a base de buena onda. El nuevo combustible deberá ser la buena onda. Y todo aquel que no actualice el combustible de su auto y siga generando mala onda fósil, será castigado limpiándole los zapatos de piel de mosquito al emperador que reinará la ciudad, siendo su primaria función la de asegurar que todos estén teniendo una buena vida. De hecho, el no tener una buena vida será punible, bajo la base de que atenta contra las reglas mismas que el emperador intentará hacer cumplir, con servicio comunitario, que incluirá una serie de viajes y actividades que ayudarán a descubrir que necesita esa persona para pasarla bien.
Todo esto se pagará con trabajo. La gente trabajará para una fortuna común, ya no para una fortuna individual, ya no para una fortuna ajena, ya no para una fortuna propia, sino para una fortuna general. Y aquel que no quiera trabajar, lo cual ocurrirá cada vez menos, será castigado obligándolo a sentarse viendo como los demás trabajan mientras él se aburre sentado en una silla tomando un trago obligatorio y descansando contra su voluntad.
En una sociedad así, en la que el trabajo no sea opcional, pero tampoco indeseable por la gran mayoría de la población; una sociedad dónde lo extraño sea no querer trabajar, dónde sin entender por qué y todavía siendo expuestos al accionar constante de eventos coactivos, la gente sienta la necesidad inherente de trabajar y se sienta mal de no satisfacer dicha necesidad, yo sería realmente feliz.
Siento que el karma de la gran mayoría de nuestra generación, la generación de finales del ochenta, es el haber nacido en una época en que te vendían un tercer mundo a precio de utopía. Oferta que la gran mayoría de nuestros padres aceptaron como quien compra una tele de dudosa calidad en Frávega, solo porque dice "¡Super Oferta!" en letras gigantes rojas y viene con un home theatre de regalo.
Exponentes de la gran generación van desde cosas superficiales como el "uno a uno" hasta cosas un poquito más profundas como el ideal de "justicia" presente en intrascendetalidades como el juicio a las juntas militares.

viernes, 7 de diciembre de 2007

Loundrycine

Me gusta cebar mate y escuchar a Landricina, imaginando que el mate me lo ceba él.
Qué se yo. La felicidad está en las pequeñas cosas que te da vergüenza contarle a tus amigos.

jueves, 6 de diciembre de 2007

Octosílabos based on a true story

Ahí estaba yo sentado, fumando un pucho tranquilo y disfrutando un té de tilo, cuando en eso llegó Marcelo y me dijo con recelo que le prestara un vinilo. Era uno de los Beatles ("Help", que yo atesoro) y furioso como un toro, le dije que se fuera.
Se quedó de cualquier manera, sin mostrar ningún decoro.
"No seas guacho" aventuró él, y sorbía de mi taza.
"Pero salí de mi casa" le dije enojado "Que yo jamás lo he prestado. Si no te vas, te doy masa".
El seguía impasible, tomando de mi bebida; y Juro por mi vida que jamás vi a alguien tan rudo.
"Dale, no seas boludo" lo oí, sin dar cabida "Que si es por el cuidado, jamás mejor guardado que en casa de un amigo; Y no te enojes conmigo, no hay razón pa' tu enfado".
Y así estuvo una hora, dale que dale hablando, más que nada recordando viejos favores al azar. Así que, muy a mi pesar, se lo terminé prestando.
Le advertí que de perderlo, Iba a sufrir las consecuencias; Que ya tenía yo ocurrencias de como lo iba a castigar -Entre ellas, hacerlo castrar y tragar las menudencias-. Lo hice jurar tres veces (Solemne le dije que era, asi que lo llevé afuera y, como es algo que él fília, lo hice jurar por la biblia) y le abrí pa que se fuera.
No sé exactamente cuanto, pero tiempo pásó un montón. Estoy furioso y con razón, porque a Marce lo estoy esperando ya hace mucho, afilando, con parsimonia, mi facón.

Aro aro aro aro: Marce la reconcha de tu hermana.

Actualización del viernes: Me encontré con Marcelo. Tan furioso estoy, que vuelo. Devolvióme mi disco, tras un regaño arisco que escuchó de mi con celo.
Sin embargo estoy furioso, y a bien saltaría de un risco sin dudarlo un pellisco. Pasó algo olímpico, un problema que es típico.
No funciona el tocadisco.

ASDF

Jueves. Mañana es viernes entonces. Osea que mañana van a hacer dos días desde que era miércoles y faltaba una semana para rendir, menos un día de descanso que planeo tomarme el martes que viene antes del final de sociolomierda, mierdología. Y al final no estoy estudiando un carajo. Estoy escuchando chistes de Landrisina, ahora una conferencia con Landrisina, Mundstcok, Mesa y Brieva, que no sé que hace ahí, pero de sociolomierda, mierdología, ni pío.
Jezabel va a significar un aumento en mi gasto de celular definitivamente. Promedio de 8 sms por día, quizás más. Por suerte inventé el "Beso y Fuera", que viene a ser como el "Cambio y fuera", pero que indica más dulcemente que quiero dejar de mandar mensajitos.
Y todavía no estudié una goma y youtube decidió cagar el sonido de los videos, asi que ya no puedo seguir viendo la conferencia por los cuarenta años de Les Luthiers.
Mi computadora es una mierda, so carreta tirada a caballo.

Diablito - Reiniciá, así se arregla el sonido y seguís viendo la conferencia
Angelito - Andá a estudiar
Diablito - ¿Para qué? Hay tiempo todavía... Tenés como 5 días.
Angelito - No te confíes. Si te lo llevás no te vas al norte.
Diablito - De última recursas y vas al norte igual, no pasa nada.
Angelito - ¡Alejá tu puto dedo de ese botón! No vas a reiniciar...

Tiene razón, no voy a reiniciar.

domingo, 2 de diciembre de 2007

Break Point

Jugué como ochenta veces al Solitario Spider con dos palos y no pude ganar ni uno; fracasado de mierda.

El viernes empecé a "salir" con Jezabel (Nótese como se van sumando mis promesas rotas), esa misma noche se estrenó la obra en el Teatro Stella Maris, después de la cual me fui para lo de Rita, una amiga de mi hermana, en dónde se festejaba el cumpleaños de otro amigo de ellas.
No sé como terminé acostándome con Rita y luego vomitando, por primera vez en mi vida, alcohol.
Y bueno, otro viernes de primeras veces.